Los paraderos de la Calle O'Higgins y de las vías aledañas en el corazón del distrito de San Vicente de Cañete se ha vuelto tierra de nadie, ni la Municipalidad Provincial de Cañete ni la Policía Nacional mueven un dedo para poner orden ni intervenir en este tipo de situaciones que ya se salieron de control y que actúan violentamente para llenar sus autos con pasajeros.
Esta vez las escenas son denigrantes
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