‘Llaman a la puerta’ es una cinta que tiene dos lecturas según se conozca o no la filmografía de M. Night Shyamalan, para los primeros volverán a encontrarse con una historia fantástica en la que el apocalipsis se desata sobre la Tierra y en la que buscarán en cada plano señales de lo que ven no es lo que parece. Y es cierto, Shyalaman va dejando pistas de que la historia no es todo lo redonda y sencilla que se muestra. Un detalle por allí, un diálogo por acá, algunos indicios evidentes y otros que no lo son tanto o que incluso caemos en la sugestión de que tienen un significado más allá de su propia existencia. Mezclar fantasía, realidad y religión es lo que tiene, que cada ve lo que quiere ver o lo que Shyalaman quiere que vea. El resultado el de siempre, vuelve a sorprender con un final que muchos espectadores no esperan por su anterior trayectoria. Y hasta aquí se puede contar.
Para aquellos pocos que no hayan visto sus otras películas se van a encontrar con una cinta de terror psicológico, con buenas actuaciones, con momentos de gran tensión, pero cuya historia no termina de dejar poso. No hay moraleja, simplemente el disfrute de una hora y cuarenta minutos de cine bien hecho.
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